domingo, 25 de diciembre de 2011

Capítulo 72: Navi'dad, ya no me ves

Estoy aquí sentado, en mi silla, con un gorro de Papa Noel bien enfundado para dar a mi cabeza la Navidad que no ha calado en mi corazón. Estoy aquí sentado, simplemente esperando.

No sé si espero a que alguien se cuele en mi casa y se deslice por una chimena imaginaria y me deje unos regalos que no merezco, con la única idea de poder descubrir el camino por donde salir de todo esto (tal vez Tiffany Dolorido me enseñe a dar con la sartén en los morros a mis miedos y a preparar unos ricos ajos fritos para ahuyentar a todos los vampiros que chupan mi ilusión).

Quizás espero una llamada o un mensaje que no llega, como quien espera ansioso en la parada del autobus sin saber que el último de la noche ya pasó. Igual es solo la llamada de la selva, que ruge y me desafía esperando que por fin muestre mis afilados colmillos al mundo civilizado.

Espero pacientemente que el espíritu de la Navidad me invada como un cosaco que, sediento de libertad, cabalga a lomos de su caballo por la estepa rusa. Quiero que arrase con todo, que se lleve por delante cualquier indicio de flaqueza, que no deje en mí ni rastro de "tiempos pasados fueron mejor", y que no permita que ningún bolchevique acabe con las niñas de mi cuadro.

Tal vez solo quiero que nadie intente convencerme que mis perdidas son asumibles, y que la vida es así, porque igual que cada vez que algo bueno sucede uno suma en su haber, cuando lo pierdes, te acabas convirtiendo en una guitarra sin cuerdas o un piano sin manos que lo puedan tocar. Porque cuando al Templo de tus Pensamientos le faltan sus dos principales pilares, aquello deja de ser un templo para convertirse en un montón de piedras, sin orden y fácil de derribar.

En unas horas amanecerá y se oirá, en muchos hogares, el sonido de carreras por los pasillos, de ovaciones y de papeles rasgar, y será un gran momento para disfrutar los que estamos con los que estamos y un motivo de celebración añadido por el simple hecho de vivirlo una vez más.

Pero este año esperaba mi regalo la noche antes, despierto e inquieto como ese niño que cree ciegamente en la magia de estas fechas, en la bondad absoluta y en el amor, y que sobretodo, nunca perdió la esperanza de pensar que, todo aquello, una vez fue verdad.

Ya no Me Ves.


Frase del día: "Feliz Navidad" (Trasnochador 3,938,542 millones, fan incondicional de los renos Blitzen Krieg, Donner Kebab y Vixxen, el reno más foxy)
-Ahora mismo estoy viendo a mi super Fle dormir como un angelito-agente doble del Infierno y del Cielo a un suspiro de mí, como siempre fue. Solo por esto ya vale realmente la Navidad. ¡Hurra!.

Y tenía que decir algo más a alguien, ummm, ¿qué era? ¡Ah, sí!...Cee Lo Green, todo tuyo: