Hace tiempo alguien me pidió/retó a que explicara si me consideraba friki y el por qué. Bueno, a grosso modo esa era la esencia del planteamiento, aunque posiblemente la pregunta tuviera más matices, pero mi memoría empieza a parecer la tinaja de Diogenes y a saber donde anda lo dicho aquellos días.
Antes de entrar a "desenmatrioscarme" a mí mismo, pensé en la necesidad básica de saber que se entiende por ser un ser friki.
Freak (Eng-Esp): Monstruo, extraño, extravagante. Fenómeno. Freak of nature: fenómeno de la naturaleza.
Friki: es un termino coloquial, no aceptado actualmente por la Real Academia Española, que se refiere a esas personas especificamente interesadas (en algunos casos de manera obsesiva) hacia los temas de la denominada cultura friki.
Normalmente un friki está interesado en la informática, la electrónica, la ciencia, la filatelia, los videojuegos, los comics, las películas, los libros y las series de ciencia ficción, fantasía y terror, el manga y el anime, los juegos de rol como el World of Warcraft, o los juegos de mesa de rol como el Dungeons and Dragons.
Dentro de la personalidad friki, hay varios niveles de frikismo, siendo el más extremo el de aquel individuo que lleva su afición o interés hasta el punto de convertirlo en un estilo de vida, al ser una parte importante de ella...
Y bla bla bla. La definición le deja a uno con el morro torcido. Principalmente porque hace que pienses que, de ser friki, solo puedes ser o un monstruo/bicho raro o un fenómeno. Y claro, es difícil saber que eres en realidad, porque en toda la historia solo hubo una persona que fuera las dos cosas a la vez, y el Fary es irrepetible. Afortunadamente.
¿Y si soy un monstruo? Los origenes los tengo. Fuí el resultado de la fusión de una especie de renacuajo albino acelerado y una célula cigoto con forma de pokeball que lo capturó. Salí de la barriga-huevo de mi madre como un alien, gritando y con la cabeza apepinada, y me tiré echando babas pegajosas dos años y correteando como un loco otros dos.
Crecí masticándolo todo 22 veces (¿qué niño normal hace eso, por Dios?) y cuando me enfadaba dejaba de respirar y me transformaba en el increible Hulk pero en versión color morado asfixia. En tierra era un niño de movimientos torpes y con coordinación cero para cualquier deporte, pero entraba en el agua nadaba como anguila eléctrica enchufada a 22o w., blanquito y delgado como el traje de comunión de un bicho palo.
La posibilidad de ser un fenómeno ni me lo planteé.
Pero luego me releí esa definiciónal completo y llegué a la conclusión que en ese perfil encajan Linus Tolvalds, Bill Watterson, Stephen Hawking, George R.R. Martin, Michael Crichton, Terry Pratchett, Thomas Alva Edison, Steve Jobs, Toni Segarra, Narcis Monturiol, María Moliner, Alfred Hitchcock, el Inspector Gadget, Mac Gyver, la Teniente Ripley, etc, etc.
Toda esta gente ha hecho de su vida un arte en su propio campo. Todos han cogido una idea y la han llevado a su materialización, hasta conseguir la excelencia. Sin duda pasaron por una fase de incomprendidos, señalados por el dedo inquisitorial de la ignorancia, vilipendiados y marginados por aquellos que se creyeron pertenecer a la "mayoría normal" que no hacía esas cosas, pero ¿quién duda hoy de ellos? (No Mac, de tí no dudaríamos ni en un millón de años...)
Ese sentimiento "friki" es el que tengo yo. Lejos de la galaxia donde puedan estar esos genios, me gusta leer libros de historia pero también un buen libro de fantasía con sobredosis de imaginación digna de ser releída varias veces. Me gusta ver películas de culto pero no me resisto a una buena dosis de explosiones surrealistas o a coches saltando por los aires tras pisar un enjuto arbusto de cuneta. Me encanta realizar el mejor slogan o el mejor copy de una promoción de aceites españoles en mi trabajo pero a su vez disfruto tratando de ser el orco con más mala leche y mejor equipado de todo Kalimdor y parte de Terrallende.
La cultura es cultura en toda su extensión, sin más. Bajo mi entender, es tan loable saber que la tercera ley de la termodinámica afirma que no se puede alcanzar el cero absoluto en un número finito de etapas como que la respuesta a "luchas com un granjero" en la guerra de insultos de Monkey Island es "Qué apropiado, tú peleas como una vaca".
Alguno o alguna pensará que no es lo mismo, que saber esa chorrada sobre un videojuego no te salvará nunca la vida, pero es por que no saben que los mayores villanos de la historia, los archienemigos de la Humanidad, crecieron jugando al Maniac Mansión, acariciando gatos de forma maléfica y practicando sus risas en cuartos oscuros con un exceso de eco. Incluso, es probable que, para salvar al planeta, pusieran antes un acertijo sobre la evolución de algún pokemón que una contraseña basada en la suma de las valencias de los metales alcalinotérreos.
Lo siento, pero no considero que saber casi todas las características de los tanques alemanes de la Segunda Guerra Mundial sea más friki que saberse la alineación de tu equipo de futbol de las 5 últimas temporadas, ni considero más estravagante llamar a un lobo azul "LadyHuarga" o hacerse fotos con Arthas en el Trono Helado que tirarse 4 horas diarias viendo engendros en Sálvame.
Y sobre todo, no es friki haber visto la saga de StarWars como diez veces o poder reírse de todos los chiste de The Big Bang Theory si lo comparamos con ir al ballet y ver un tío embutido en unas inquietantes mallas intentado hacernos creer que es el cisne alfa de su lago imaginario. Y leches, que han echado 15 veces por la tele Pretty Woman y cada vez tiene más audiencia, ¿qué nadie ve que es la historia de un putero caprichoso y una tía de lo más recreativa, que para jugar con ella tienes que echar monedas?
Todos hacemos de nuestros gustos nuestra vida, todos hemos nacido con un mente ávida y maleable que ha absorvido lo que más nos ha llamado la atención. Yo he crecido a la sombra de Gomaespuma, Faemino y Cansado, Días del Tentáculo, Mortadelo y Filemón, series de animales con pantalón y sombrero, libros de Pratchett y rodeado de una naturaleza que me ha dado golpes, mordiscos, urticaria, alegrías, tristezas y mil lecciones sobre en qué dirección usar un cuchillo para afilar una estaca, los peligros del retroceso de la goma de un tirachinas casero, o de cómo coger cerezas al estilo Mogli sin aterrizar al estilo King Kong.
No es cuestión de madurez, es cuestión de ser tú mismo. Friki o no friki no se ha de renunciar a descubrir lo desconocido, tenga la forma que tenga, ni a absorver en la mente todo aquello mágico y refrescante que me traiga el viento, venga del Este o del Oeste, del Norte o del Sur. Espero que después de esto, para que me toméis en serio, no tenga que creparme el pelo y ofrecer una imagen frívola y teatral de mí porque... i can have a dark side too... A friki's spoken.
Un Al-nnister siempre paga sus deudas.
Frase del día: "Gracias por el lado oscuro (tm), gracias por un juego tan divertido" (Al -Rock and Nerd)
-I'll see you on the other end.