jueves, 10 de abril de 2014

Capítulo 141: Sempre

¿Dónde nacen los sentimientos? ¿Por qué nos emocionamos hasta cotas inimaginables por  motivos o causas que resultan aparentemente triviales?¿Qué provoca esa fuerte vinculación emocional que se escapa a nuestro entendimiento? Nunca lo he sabido, y dudo que le encuentre una explicación lógica y sensata, pero en días como hoy me siento completamente unido a mi dictado interior.

No sé de dónde surgió, o cómo arraigó en mí, qué lo hizo crecer y qué motivo lo arrastrará, indudablemente, conmigo hasta la muerte. Solo sé que crece y late junto a mi corazón, como si una segunda piel se tratara, una que no puede ser arrancada ni desgarrada con los dedos.

Ya no solo es un sentimiento, es un orgullo, es el formar parte de algo estando tan lejos y tan cerca. No es recíproco, como los amores verdaderos, ni me consuela cuando me falla o apaga la llama de mi candor, pero no me importa, sigo firme en pos de él, contra viento y marea.

No sé explicar por qué siento o quiero así, no sé definir en palabras el por qué de todo esto. Quiero creer que mi fidelidad va unida a todo aquello que logra superar lo divino y lo humano y acaba formando parte indispensable de mí. Alguien me dijo una vez que era una persona muy vehemente y tal vez no estuviera tan equivocada, por despectiva que resulte esa palabra, porque las cosas que quiero las quiero de forma descontrolada y visceral. Siempre he pensado que uno deber querer con la cabeza, el corazón y la inconsciencia, pues esta es la única manera de no flaquear, de saber que nunca fallarás si has de dar la vida por ello.

Palpita fuerte junto a mi heterogéneo mundo interior de sentimientos desatados e irracionales. Debería estar triste, alicaído, pero no he dejado de gritar y cantar por él. Desde que tengo razón es mi clamor, mi vinculación y sentimiento de pertenencia. No elegí, nació en mí, no aposté al mejor postor, viví junto a él los tiempos oscuros y sombríos, no me pidieron formar parte de él, lo hice yo de motu proprio.

Grito, callo, sonrío, me enfurezco, animo e insulto, sí, pierdo los papeles y saco lo mejor y lo peor de mí, no me reconozco pero sin duda soy yo, debía estar dentro. Solo así es como nos conocemos realmente, cuando la pasión gobierna nuestro barco.

Son unos colores, es una afición, un himno y una decisión. Perdimos, pero no estoy triste, porque estoy orgulloso de ser lo que soy y de la camiseta que llevo al escribir esto. Soy barcelonista, soy culé, y aunque pasen mil años, mil jugadores o perdamos mil finales, nada hará que deje de sentirme fiel a este escudo.

Es fantástico sentir, es fantástico creer, es fantástico amar incondicionalmente las cosas, porque aunque duela el doble cuando te fallan, es la única manera de sentirse vivo de verdad.

Olele le, olala la, ser del Barça es el millor que hi ha...   


BreakingAl: "Si caiem ens aixequem" (Habrá gente que pensará que tan solo hablaba de futbol)
-Cuanto más alto, más dolorosa será la caída, y caerán.
 

2 comentarios:

  1. y yo que pensaba que te estabas declarando ;-) ànims!!!!

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  2. Podría ser un buen regalo de cumpleaños que te ganasen esta dichosa liga el próximo domingo. Felicidades y suerte!

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