jueves, 4 de agosto de 2011

Capítulo 63: Gambito de Dama

Esta es mi posición. Esta es mi casilla en el tablero. No se cuál es mi verdadero proposito ni quién es el enemigo, pero la voy a defender a capa y espada. Tampoco se a qué Rey rendirle cuentas y no tengo Reina, pero ahora miro hacia delante con el corazón henchido, porque no estoy solo en esta batalla.

Juego junto a otras piezas, cada una de ellas singulares, que me hacen sentir parte de esto. No son siempre las mismas, muchas de ellas se perdieron en diagonales infinitas o se salieron por la tangente, pero nunca faltan las incondicionales.

Son esas piezas por las que vale la pena hacer sacrificios, por las que te atreves a avanzar, sin miedo pero con respeto, por este insondable y misterioso tablero. Porque cubren mis espaldas y bloquean todo mal que me amenace, luchan junto a mí codo con codo y no se rinden, son leales. Porque el objetivo no es ganar, es no dejar de estar ahí y salir adelante, como un todo.

Sí, a veces arden ciudades, pero el fuego solo afecta a los tejados, porque los cimientos son de piedra, sólidos y robustos. Pero no, no caen, porque precisamente, el no moverse de su lado, es lo las hace más fuertes. Muro contra muro, forjando apoyos, las vuelve invencibles.

Es un juego complejo, nunca sabes si estás con blancas o negras, pero el color da igual siempre y cuando se esté en el mismo bando. Cada uno nos movemos de una forma y tenemos una condición, y a pesar de no saber el valor de cada uno de nosotros, sí se que un peón puede llegar a ser Reina y que cualquier pieza puede hacer arrodillarse al Rey.

Esta partida dura solamente toda una vida y el tiempo que pasamos enrocados en nosotros mismos es un tiempo precioso que, inexorablemente o no, perdermos. Se que estás ahí, dando saltos como un caballo y con orejas de elfa para dismular. Pero el aroma a gran dama te delata, y se que una gran Reina, ¡qué digo! ¡la gran Birreina Morcilla! ronda constantemente a mi alrededor protegiendo todo lo que realmente importa.

Puede que al final solo seamos simples peones, pero rugimos juntos con fuerza, y al dar pequeños pasos adelante, hacemos retumbar el suelo con nuestros pies.

Solo lo que no queremos ver se vuelve invisible. Al1 a Fl3. Jaque mate.



Frase del día: "Domingueros on the water road, lo que me faltaba" (AlH2O)
-No, no se puede nadar haciendo la nutria o la rana-panza-arriba-agonizante en un carril tan estrecho y compartido, ¿qué no lo ves, cantar's soul? Y cámbiate ese bañador de Mitch Buchannon hortera, que esto es una piscina municipal, no las playas de Santa Mónica...

4 comentarios:

  1. que bonico del tó eres siempre!

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  2. Jugar con ogros durante un tiempo me permitió saber que el Gambito de dama es efectivamente un sacrificio, pero falso si es en blancas y coherente si es en negras, salvo que nos pongamos cabezones y queramos mantener a los peones, claro. Ahí ser negro es finiquitamiento seguro.
    Por esa misma razón, porque los Gambitos son aperturas, ni siquiera defensas, no puede haber jaque mate tan pronto.
    Queda mucho por jugar, mucho por mover, mucho por avanzar y otro tanto por sacrificar, porque es necesario y porque el ajedrez es asiiiiií, no lo he inventado yoooooo, que dice la canción y la vida. Pero claro, hay que arriesgarse y ser acción. Movimiento. Hop, hop, hop!

    Por cierto, preferiría no ser caballo, le tengo cierta manía al sonido y a la forma que tiene de moverse y además, me he imaginado rollo pequeño pony y me ha dao un rollo raro que no mola, como si me proyectaran fuck yusssss.
    Mejor soy una torre, sí. Grande y fuerte. Eso se me da mejor. Con las orejicas e inflámdome a morcillaca de la de Burgos güena, fale, pero Torre en definitiva.
    Es que peón se me antoja chiquitín y además aunque te empeñes, de dama tengo poco... ¡Si me río cuando dicen ojete y suelo ser yo la que más lo dice! :P Prefiero que la dama sea cierta señora que no entiende lo que significa sólo una cucharada y a la que le gusta de decir ra, pita , rapitá. Y que ambos tengamos que protejerla de todo. Me parece más justo y más digno y creo que es la que más se lo merece. Desde aquí huele a chamusquina, su ciudad invisible. ¿Te parece?

    En fin, que está bien saber que andas por la partida, aunque eso ya lo sabía yo, que soy rubia pero ya ha quedao demostrado por cierta frase en cierto vagón de metro que luego fue posteada que de rubia, regulín. Ahora a formar y a darle a la vida lo que se merece! Sangre y fuego! Oid mi rugido! Sacercalinvierno y nosostros sin cosecharporquenonosalelaminga!

    Y eso.

    Gracias, Al. ;)

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  3. No acostumbro en mis entradas, pero hoy haré una excepción.
    En este juego no hay reglas, se reescriben constantemente, y se permiten varias damas, todas las torres que quieras y tantos caballos como puedas alimentar. Aquí nadie es peón toda la vida y las damas suelen acabar encerradas en las torres, para huir de los terribles alfiles que quieren casar o mandar al infierno al que no crea en el "por los siglos de los siglos".
    Los gambitos, deberías saber que, además de ser aperturas, son también unos seres fantásticos que lanzan cartas explosivas y los favoritos de niños pequeños con mucha imaginación. Y tú tenías mucha traza para eso.
    No, no es jaque mate pastor, pero ya te digo, no hay normas, y mantenerse unidos es ganar la partida desde el primer movimiento, por mucho que el otro rey ande de vacaciones a nuestra costa.
    Ya lo decía Sabina, las niñas ya no quieren ser princesas, quieren ser caballeras andantes, con afiladas espadas, y repartir justicia a mandoblazo limpio, y seguro que no eres una torre aburrida que anda por los laterales de este juego sin pena ni gloria. Pero de serlo, enrocate con el Rey, que tú tienes un enchufe especial y defiende el centro y a la Reina que arde en silencio. Yo voy a seguir disfrutando de la supuesta fragilidad de un peón, me colaré entre las lineas, sembraré el caos y luego traeré la cosecha de vuelta a casa... o no, porque un greyjoy nunca siembra, aunque siempre está dispuesto a recoger.

    Y tal.

    De nada, Fle. :)

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  4. chatin i need your help como el agüita que corre por los grifos...me he ocultado...lo necesitaba...invitado estás ya me explicarás este mundo!Besicos


    http://mysoulfeaturingmyself.blogspot.com/

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